Por Elisa Ball, directora de Recursos Humanos para América Latina y el Caribe en Fortinet
Este abril 26, cuando celebramos el Día Internacional de las Jóvenes en las TIC, desde Fortinet destacamos la necesidad de alentar a las mujeres jóvenes a considerar este creciente campo. El empoderamiento de las mujeres y el tan esperado plano de igualdad es de prioridad para muchos, pero a menudo no se discute la importancia de promover una mayor presencia femenina en el mercado de la ciberseguridad. Con empresas en plena transformación digital y un creciente panorama de ciberamenazas en los negocios, la necesidad de expertos más calificados en ciberseguridad está aumentando rápidamente y representa una oportunidad de carrera única, además de una ocasión para que tanto las mujeres jóvenes como las empresas tecnológicas cosechen los numerosos beneficios de una mayor presencia femenina en este sector vital.
Fortinet se asoció recientemente con IDC para estudiar la ciberseguridad en los negocios en América Latina. El LATAM Cybersecurity Interactive Whitepaper reveló que casi el 25 por ciento de las empresas en Latinoamérica estarían contratando talento de ciberseguridad. El problema es que tres de cada cuatro empresas también tienen dificultades para encontrar los recursos que requieren, dejando una brecha de talento por cubrir.
Según un estudio global de Frost & Sullivan, las mujeres están muy poco representadas en la industria de ciberseguridad con solo un 11 por ciento. El informe, que explora los roles de los hombres y las mujeres en el sector de seguridad cibernética en 170 países, también revela una grave discrepancia entre hombres y mujeres empleados en el sector en América Latina con solo el 2 por ciento de mujeres participantes en puestos gerenciales, en comparación con el 28 por ciento de los hombres, y 0 por ciento de mujeres en puestos de nivel C.
La falta de habilidades contribuye en gran medida a esta brecha de género, solo el 42 por ciento de las mujeres tienen títulos universitarios en informática y ciencias de la información frente al 48 por ciento de los hombres. La brecha de género se amplía aún más en ingeniería, donde apenas el 14 por ciento de las mujeres cuentan con títulos en este campo en comparación con el 22 por ciento de los hombres.
En una época donde las guerras se desatan en línea, donde las empresas pueden ser fácilmente interrumpidas por una brecha de TI y donde la seguridad de una nación entera puede verse perjudicada por un único ciberataque, la urgencia para que las habilidades de ciberseguridad y la diversidad dentro del sector estén a la par con la creciente demanda de seguridad continúa aumentando. La educación adecuada y el fomento de la diversidad, sin embargo, no solo son necesarios para lograr una fuerza laboral de ciberseguridad más diversa y preparada, sino también para impulsar la innovación y aumentar la productividad empresarial.
Varios estudios han demostrado que la diversidad de género en el lugar de trabajo puede generar muchos beneficios. Investigaciones del Centro Nacional para las Mujeres y la Tecnología de la Información (NCWIT, según sus siglas en inglés) revelan que las empresas con equilibrio de género pueden experimentar mejores desempeños financieros y de empleados, crecimiento y productividad, entre otros. Un estudio de McKinsey, que exploró los resultados financieros con relación a la composición de género en compañías tecnológicas de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México y Perú, reveló que las organizaciones con una o más mujeres en sus comités ejecutivos tuvieron mejor desempeño que aquellas con equipo exclusivamente masculinos, con un rendimiento del capital 44 por ciento más alto y un margen de ingresos un 47 por ciento más alto.
Con la ciberseguridad actuando como un componente fundamental para que las empresas protejan sus valiosos datos, clientes y reputación, la creciente necesidad de contar con profesionales bien capacitados para controlar el panorama de amenazas en constante expansión nunca ha demandando nuestra atención más de lo que lo hace hoy. En una región donde más de 12 millones de mujeres estaban desempleadas en 2017, el sector de ciberseguridad representa una oportunidad laboral para las futuras generaciones de mujeres profesionales en América Latina y el Caribe.
Como proveedor líder de ciberseguridad en la región, estamos comprometidos a ayudar a abordar esta brecha de talento y de género. Por esta razón, creamos el programa Fortinet Network Security Academy (FNSA) hace cuatro años. Diseñado para desarrollar y capacitar a expertos en ciberseguridad y así ayudar a reducir la escasez global de habilidades, el programa FNSA es gratuito para universidades y estudiantes y está disponible en todo el mundo, inclusive en países de Latinoamérica y el Caribe.
Cambiar la narrativa desde una importante falta de presencia de mujeres en la industria a un enfoque proactivo de empoderamiento de las mujeres, así como cambiar la cultura y construir un ambiente laboral próspero para que los jóvenes profesionales puedan desarrollarse, es esencial para el avance del sector de la ciberseguridad en la región.